2008
2008
CELEBRAMOS EL CENTENARIO
En al año 2.008, las Religiosas Trinitarias celebran su CENTENARIO en Castellar volcadas en la labor de educar.
En al año 2.008, las Religiosas Trinitarias celebran su CENTENARIO en Castellar volcadas en la labor de educar.
En enero del 2.000 se entrega la solicitud de acceso al régimen de conciertos educativos en Educación Infantil, curso académico 2.000-2.001.
En diciembre del 2.000 se solicita el Convenio o concierto pleno para la financiación del Segundo Ciclo de Educación Infantil.
Con fecha 2 de enero de 2.001 la Conselleria de Educación y Ciencia aprueba la solicitud de acceso al sistema de financiación de las unidades de Segundo Ciclo de Educación Infantil (5 años). El 8 de octubre de 2.002 se le concede al colegio el concierto singular en las tres unidades de Educación Infantil (3, 4 y 5 años).
En 1.998 se aprueba la subvención para Educación Infantil (3, 4 y 5 años).
En 1.999 se firma la prórroga del concierto de Educación Primaria y E.S.O..
En la «Orden del 29 de Junio de 1.999, de la Conselleria de Cultura, Educación y Ciencia, por la cual se concede autorización de apertura y funcionamiento en los niveles educativos que se especifican en el anexo a diversos centros docentes privados», (publicada el 11 de agosto de 1.999) se autoriza la apertura y funcionamiento del centro en los siguientes niveles:
Centro: Nuestra Señora del Rosario
Titular: RR. Trinitarias
Domicilio anterior: C/ Virgen de Lepanto, 18
Localidad: Valencia
Provincia: Valencia
Código: 46009
Enseñanzas que se autorizan en el nuevo domicilio de la C/Fortuna, nº 35:
Las hermanas, junto con los superiores, después de orar y discernir cuál es la voluntad de Dios, nos lanzamos a «SEGUIR», optamos por la educación de los niños y adolescentes. Después de una larga espera, el INSTITUTO DE LAS HERMANAS DE LA SANTÍSIMA TRINIDAD, consigue la licencia de obras el 15 de septiembre de 1.997, fiesta de la Virgen de los Dolores y el 22 de septiembre, comienzan las obras del nuevo edificio, que abarca desde Educación Infantil hasta Educación Secundaria Obligatoria.
El 23 de noviembre de 1.998, finalizadas las obras y pasadas todas las inspecciones correspondientes nos entregan el documento de la LICENCIA DE APERTURA, y el día 30 de noviembre, festividad de San Andrés, entramos en el nuevo edificio del Colegio inaugurando el comedor.
El 18 de junio de 1.992 se concede autorización para impartir la Educación Secundaria Obligatoria (E.S.O.). El día 19 de septiembre de 1.996 se firma el concierto educativo para una unidad de E.S.O., una unidad de 8º de E.G.B. y seis unidades de Enseñanza Primaria.
El 17 de Junio de 1.997 nos aprueban la renovación del concierto y el 26 de septiembre se firma para: seis unidades de primaria y tres unidades de E.S.O.. En este año el colegio tenía 3.718 metros cuadrados, de los que 2.500 correspondían al campo de deportes. Es de carácter privado, con concierto pleno de Enseñanza Primaria, 1º de E.S.O. y 8º de E.G.B.. Es de ideario católico, y tiene como capellán a Don Miguel García, párroco de la Epifanía del Señor, y que fue también coadjutor de Castellar.
En el curso 1.980-81 se crearon 2.500 metros cuadrados de instalaciones deportivas con fondos propios. En mayo de 1.986 se firma el primer Concierto Educativo de Régimen General.
Recibió la clasificación definitiva el 26 de octubre de 1.978, por Orden Ministerial que fue publicada en el BOE del 23/1/1.979, sobre la calificación y transformación de Centros no Estatales, con un total de 350 alumnos, ocho unidades de E.G.B., dos unidades de preescolar y una unidad de jardín de infancia.
En los números 101 y 102 del BOE de fechas 28 y 29 de abril de 1.979 se publica la relación de los números de orden definitivos asignados a los Centros no Estatales y estatales según Orden Ministerial de 27 de octubre de 1.977 (BOE de noviembre), siendo para el Centro Nuestra Señora del Rosario de Castellar, el número 46009150.
En el curso 1.967-68 comienza a impartirse el bachiller elemental, con carácter libre. Las alumnas se examinan en el Instituto San Vicente Ferrer de Valencia. Y en febrero de 1.973 el Estado concede una subvención del 100%.
Las madres de Castellar también solicitan que el obispado se haga cargo de los desperfectos de la lluvia para que regresen las religiosas. Papel importante tuvo el párroco de entonces Don Antonio Genovés, en la toma de algunas decisiones.
Al fin se decide que se les venda el solar y las obras realizadas por la cantidad de 100.000 pesetas, a pagos aplazados, los que deseen las religiosas, siempre que no sean inferiores a 1.000 pesetas, sin intereses durante los primeros cuatro años, y si transcurriera, se les cobraría un interés del 4%. Las religiosas aceptaron y regresaron para el curso del año 1.961-1.962.
En el 1.959 se realizan nuevas obras con recursos propios, con el fin de agrandar el colegio, pero al llegar el mes de abril, debido a las torrenciales lluvias, se les hunde el techo del colegio, por lo que piden presupuesto, y se asombran de la cantidad a que asciende, 200.000 pesetas, mucho dinero para una orden tan pobre.
Siete meses más tarde, el 28 de julio de 1.959, la falta de recursos obliga a la orden a tomar una decisión importante: DECIDEN IRSE DE CASTELLAR. La marcha de las religiosas conmociona al poblado que se ve privado de la enseñanza de sus pequeños. En esta época comienza una serie de protestas y cartas dirigidas al arzobispado, pues la gente le parece que no ha hecho lo suficiente para la permanencia de las religiosas, y la educación de sus hijos.
El Ministerio de Educación Nacional, el 12 de mayo de 1.947 les concede un permiso provisional para tener dos clases de párvulos y dos más de enseñanza primaria graduada de dos grados. El 8 de agosto de 1.950 se concede la autorización con carácter definitivo.
En el año 1.944 el Ayuntamiento de Valencia atiende a la demanda de las religiosas y les concede una subvención de 2.500 pesetas. También se pidió ayuda a la marquesa de Benicarló.
Tras el final de la contienda, en 1.939 regresan las Trinitarias para continuar su labor educativa. El estado financiero de las religiosas era bastante pobre, ya que la enseñanza era gratuita, y los ingresos bajos
Con la llegada de la Guerra Civil Española y la persecución de religiosos, expulsan a las Hermanas del colegio-convento
Así, el 1 de febrero de 1.908, la Junta de Fábrica de la Parroquia con aportaciones de feligreses, construye en un solar cedido por Don Juan Tamarit una casa colegio que se confió a las Trinitarias.
El 4 de noviembre de 1885 la Orden Trinitaria recibe la aprobación diocesana de la nueva congregación.